Esta vez, la pelea no se centró únicamente en ellas dos, sino que involucró a Lola Latorre, la hija de Yanina, lo que desató la furia de la panelista.
La discusión se generó cuando Moria utilizó un comentario desafortunado, tildando a Lola de “travesti” en un contexto televisivo que rápidamente se viralizó, generando indignación en las redes sociales y, sobre todo, una respuesta categórica de Yanina, quien no dejó pasar el comentario y salió al cruce con toda su artillería.
Todo comenzó durante una de las emisiones de un programa de espectáculos donde Moria Casán, fiel a su estilo irreverente y sin filtro, lanzó un comentario que generó una polémica inmediata.
Hablando de una situación relacionada con una fiesta y de la presencia de Yanina y su familia, Moria deslizó la frase “Yanina fue con el marido travestido y la hija parece un travesti”.
Este comentario, que parecía más una provocación que una crítica, no solo fue repudiado por muchos espectadores, sino que también desató la ira de Yanina Latorre, quien consideró que Moria había cruzado un límite al involucrar a su hija en un ataque personal.
Yanina no tardó en responder. Desde su lugar como panelista en otro programa de espectáculos, tomó la palabra y expresó con contundencia su enojo y dolor por el comentario de Moria.
“No puedo creer que una mujer grande, una abuela como Moria, hable así de mi hija”, comenzó diciendo visiblemente molesta.
Yanina destacó que siempre ha estado dispuesta a enfrentar las críticas y peleas mediáticas que le corresponden a ella como figura pública, pero que bajo ninguna circunstancia iba a permitir que involucraran a sus hijos.
“Mi hija Lola es una chica de 20 años, es mujer, no es ningún travesti y no tiene por qué soportar que una persona como Moria diga semejante barbaridad al aire”, agregó con firmeza.
La panelista continuó su descargo recordando que Moria Casán, quien siempre ha defendido las banderas del feminismo y ha sido una figura emblemática en la lucha por los derechos de las mujeres, había caído en una contradicción al utilizar una frase tan despectiva y fuera de lugar.
“Moria se hace la feminista número uno, pero después dice esto. Me parece una total falta de respeto y una desubicación absoluta”, sentenció Yanina, dejando en claro que no iba a permitir que el ataque pasara desapercibido.
Yanina también aprovechó la oportunidad para diferenciarse del estilo de Moria y aclarar que ella nunca se metería con los hijos de otra persona.
“Yo puedo pelearme con Moria, puedo discutir con ella lo que quiera, pero jamás me metería con Sofía Gala, su hija. Jamás atacaría a una persona que no tiene nada que ver con el conflicto”, explicó Yanina, haciendo referencia a la actriz Sofía Gala Castiglione, hija de Moria.
Esta aclaración no fue casual, ya que Yanina quiso marcar un límite ético en las discusiones mediáticas y dejar en evidencia que Moria había cruzado una línea que ella nunca cruzaría.
En medio de su descargo, Yanina también se tomó un momento para hablar sobre el impacto que este tipo de comentarios tienen en sus hijos, especialmente en Lola.
La joven, que ya ha tenido que lidiar con la exposición mediática desde muy chica debido a la popularidad de sus padres, nuevamente se vio envuelta en una polémica que no buscó ni provocó.
Yanina expresó su preocupación por cómo este tipo de ataques afectan la vida personal y emocional de Lola, quien, a pesar de ser una chica fuerte y segura, no deja de ser vulnerable ante la crueldad de los comentarios públicos. “No tienen idea de cómo le afectan estas cosas.
Ella no tiene por qué bancarse que digan semejante barbaridad de ella solo porque su mamá está en la televisión”, dijo Yanina con un evidente tono de dolor.
La polémica no tardó en escalar en las redes sociales, donde los seguidores de ambas figuras tomaron partido. Por un lado, muchos usuarios apoyaron a Yanina y repudiaron los dichos de Moria, considerándolos innecesarios, ofensivos y fuera de lugar.
Por otro lado, los fanáticos de Moria defendieron su estilo frontal y provocador, argumentando que siempre ha sido así y que sus comentarios no deberían tomarse tan en serio.
Sin embargo, más allá de las opiniones divididas, quedó en evidencia que el comentario de Moria había generado un malestar genuino y que Yanina no iba a quedarse callada.
El conflicto entre Yanina y Moria no es nuevo. A lo largo de los años, ambas han protagonizado varios cruces mediáticos, en los que no faltaron las acusaciones, los insultos y las chicanas.
Sin embargo, esta vez la pelea tomó un cariz más personal al involucrar a la familia de Yanina, lo que llevó la discusión a un nivel mucho más delicado.
Yanina recordó que, en el pasado, había tenido varios desencuentros con Moria, pero que siempre se habían limitado a ellas dos.
“Yo puedo bancarme lo que me digan a mí, porque soy una mina grande y estoy en este medio hace años, pero no voy a permitir que metan a mi hija en esto”, reiteró con firmeza.
Por su parte, Moria Casán no pareció arrepentida por sus dichos. Fiel a su estilo, evitó pedir disculpas y, en cambio, defendió su comentario como parte de su “humor ácido”.
Sin embargo, muchos señalaron que hay una gran diferencia entre el humor y el ataque personal, y que en esta ocasión Moria había cruzado una línea que no debía cruzar.
El cruce entre Yanina y Moria puso nuevamente sobre la mesa el debate sobre los límites del espectáculo y la farándula.
¿Hasta dónde es válido el “humor” o la crítica? ¿Cuándo se convierte en un ataque personal que afecta la vida privada y emocional de las personas involucradas? Estas preguntas, que se han planteado en más de una ocasión en los medios, volvieron a surgir con fuerza a raíz de este enfrentamiento.
Mientras tanto, Yanina Latorre dejó en claro que no piensa quedarse callada ante este tipo de situaciones y que seguirá defendiendo a su familia con uñas y dientes.
“Yo no voy a dejar que nadie se meta con mis hijos. Pueden decir lo que quieran de mí, pero con mis hijos no”, afirmó con total convicción. Su postura firme y protectora como madre resonó en muchas personas que se solidarizaron con ella y apoyaron su descargo.
En conclusión, la pelea entre Yanina Latorre y Moria Casán no solo generó un escándalo mediático, sino que también abrió un debate sobre los límites de la crítica y la exposición pública.
El comentario desafortunado de Moria hacia Lola Latorre fue el detonante de un conflicto que, para Yanina, no tiene justificación. Como madre, Yanina defendió a su hija con todas sus fuerzas y dejó en claro que no permitirá que nadie la ataque injustamente.
Este episodio, más allá de las opiniones divididas, dejó una lección importante: detrás de las figuras públicas, hay familias reales que también sufren y merecen respeto.
